nº54 | sostenibili-qué

Soberanía de las semillas, resistiendo desde la raíz

En Andalucía hemos dado un paso al frente en la conservación de la biodiversidad cultivada, creando un espacio de resistencia a las presiones del mercado y a la desidia de las administraciones.

Desde hace unos años, la concatenación de crisis (económicas, sanitarias y ambientales) han vuelto a hacer visible en nuestro entorno el problema de la escasez de alimentos. Familias en busca de comida en instituciones de solidaridad o «colas del hambre», como las denominan los poderosos a través de sus medios de comunicación. Por otro lado, como si fuesen realidades distintas, se nos ofrecen noticias sobre las protestas de agricultores, ahogados entre los precios que reciben de las grandes cadenas de distribución y el alto coste de los insumos (combustible, maquinaria, semillas, agrotóxicos, fertilizantes) de los que dependen para producir alimentos.

Desafortunadamente esta realidad que ahora vemos cercana, siempre ha estado presente en otros lugares. Según el último informe de Naciones Unidas, alrededor de 2.300 millones de personas en el mundo (29,3% de la población) estaban el año pasado en situación de inseguridad alimentaria moderada o grave y casi 3.100 millones de personas no pudieron permitirse mantener una dieta saludable.

Frente a estas calamidades, desde hace años muchas comunidades rurales de África, Asia y América Latina se han puesto manos a la obra para hacer realidad la soberanía alimentaria, una solución desde abajo contra el hambre y la explotación campesina. Ahora estamos descubriendo que también aquí necesitamos «medios sustentables de producción, distribución y consumo de alimentos basados en la pequeña y mediana producción». Así es como definen la soberanía alimentaria desde la Vía Campesina, la organización que da voz a las comunidades campesinas en todo el mundo (https://viacampesina.org).

Para hacer realidad la soberanía alimentaria es imprescindible disponer de las semillas adecuadas. Lograrlo no es tarea fácil, en la actualidad seis grandes corporaciones controlan el 81% de las ventas mundiales de semilla, lo que implica una lucha desigual por este recurso. Afortunadamente les ha surgido una rival capaz de hacerles frente: la experiencia desarrollada en India en torno a la soberanía de las semillas.

Lo llaman satyagraha de las semillas basándose en la tradición Gandhiana de no colaboración con las leyes injustas. Literalmente significa «lucha por la verdad». El término complementario es swaraj, que subraya la gobernación no jerárquica, sino por el autogobierno, a través de los individuos y la construcción de la comunidad. El tercer termino Gandhiano es swadeshi, el ‘espíritu constructivo comunitario para desarrollar alternativas’.

Las comunidades rurales de la India están desarrollando un movimiento en el que se adoptan estos términos: anna swaraj (soberanía alimentaria ) y beej swarajla (soberanía sobre las semillas), llenándolos de nuevos significados como la desobediencia a las leyes y tratados sobre semillas y recursos genéticos injustos para los agricultores y la puesta en marcha de alternativas basadas en bancos comunitarios de semillas, sistemas locales de suministro y la búsqueda de alternativas de agricultura sostenible más apropiadas. Estas experiencias están siendo difundidas y defendidas dentro y fuera de la India a través del movimiento Navdanya (https://navdanyainternational.org/key-issues/seed-freedom/).

Este movimiento de la soberanía de las semillas se está expandiendo y enriqueciendo mediante el diálogo con otros campos del conocimiento, especialmente los relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación de código abierto (https://www.opensourceseeds.org/en/home) y también territorialmente, gracias a las organizaciones que actuamos localmente.

En Andalucía la resiembra e intercambio de semillas se venía haciendo desde tiempos ancestrales, pero esta forma de resistencia ha ido restringiéndose e, incluso, erradicándose en algunos cultivos por la imposición del modelo de agricultura corporativo. Como respuesta, desde la Red Andaluza de Semillas decidimos crear la red de Resiembra e Intercambio (ReI) en 2007, en asamblea celebrada en la cooperativa La Verde de Villamartín (Cádiz).

Las actividades de la ReI se organizan en cuatro ejes de actuación: las redes de agricultorxs investigadorxs, las campañas de intercambio asociadas a los ciclos agrícolas, las iniciativas Estrénate, Describe y Apadrina y las ferias andaluzas de la biodiversidad agrícola.

Las redes de agricultorxs investigadorxs son grupos locales que generan nuevos conocimientos sobre procesos de manejo de la biodiversidad agrícola. Actualmente hay iniciativas de mejora agroecológica participativa de cereales y caracterización de hortalizas.

Dos veces al año ponemos en marcha el intercambio de semillas, uno de variedades de primavera-verano y otro de otoño-invierno. Y cada año, las campañas Estrénate con la biodiversidad cultivada, dirigida a centros educativos y entidades con huertos ecológicos, Describe una variedad tradicional, para formar a personas interesadas en la caracterización de variedades y Apadrina una variedad tradicional, para quienes no disponen de semillas y desean iniciarse en el intercambio.

Las ferias andaluzas de la biodiversidad agrícola son espacios abiertos para intercambiar semillas y compartir el conocimiento tradicional. Cada año una red local nos ofrece su pueblo para realizar conferencias, talleres, visitas, actividades infantiles, exposiciones de semillas y productos, aprender de nuestros mayores e intercambiar experiencias.

Gracias a este empeño, en los últimos quince años, mas de ochocientas participantes diferentes, entre agricultores y agricultoras y huertos escolares y comunitarios han dado un paso al frente en la conservación de la biodiversidad cultivada en Andalucía. Hemos compartido mas de 9.000 lotes de semillas de centenares de variedades y decenas de cultivos diferentes, creando un espacio de resistencia a las presiones del mercado y frente a la desidia e indiferencia de las administraciones. Todos los detalles de esta información en https://www.redandaluzadesemillas.org/que-hacemos

Nos apoya

Galería Taberna ANIMA, propiedad del austriaco Peter Mair, que en 1985 recaló por el Barrio de San Lorenzo y abrió este negocio.