nº44 | mi cuerpo es mío

¿I de invisible? No, de inmenso

Intersexualidad

En mi bloque al sur de Sevilla, la costumbre siempre ha sido que mi familia sea la encargada de guardar los envíos de Correos cuando el resto del vecindario está fuera. Sin embargo, jamás olvidaré lo ocurrido una mañana de agosto de 2014, cuando vino una carta urgente para mí de Citogenética del SAS. Llevaba años rebotando de médicos en especialistas porque veía que mi cuerpo no encajaba en lo normativo. Lo abrí y leí «Resultado: 47, XXY». Me enfadé porque no me podía creer que yo fuese uno de esos «casos raros» que había visto al estudiar biología en la facultad, pero, poco a poco, fui aprendiendo que no era una anomalía, sino una variación natural humana que se enmarcaba dentro de las «intersexualidades» junto a otras muchas variaciones corporales. Y aunque en un principio parecía estar solo, fui hallando datos como que igualamos al número de personas pelirrojas a nivel global, que hay más individuos intersex en Andalucía o que incluso existe una buena acogida desde los colectivos LGTBIQA+.

En resumen, solo buscaba un poco de contexto personal para la siguiente infografía que ojalá hubiese tenido aquellos días en los que me sentí abrumado por los resultados y en soledad por la falta de referentes a mi alrededor.

Nos apoya

Las comadres somos la comadre Vanesa y la comadre Begoña, dos amigas que nos conocemos desde hace ya varios años y que hemos tenido la suerte y oportunidad de emprender este camino juntas. Contando con que las dos tenemos una capacidad innata para relacionarnos con todo aquello que se mueve, sabíamos que teníamos que trabajar de cara al público y si estábamos sintiendo el proyecto como algo nuestro, mejor que mejor. Un proyecto que fuera una forma de vida y una apuesta por un futuro saludable y responsable. Para llevarlo a cabo y sentirlo aún más nuestro decidimos quedarnos en el barrio y así ha sido. Gracias al apoyo de familiares y amigos hemos podido “poner en pie” nuestra frutería – verdulería, un espacio que nos gustaría que lo sintierais como vuestro y que lo disfrutarais cada vez que os acerquéis. En Las Comadres no sólo queremos ofreceros productos de gran calidad, a buen precio; sino que nos gustaría aprender, intercambiar saberes y convertir nuestro local en un espacio de encuentro en el barrio.